Denuncia en verso. Poema escrito por Celia Asencio Bonilla

En la madeja de los sueños,
esa que dejé tras el fragor de las bombas,
anida todo lo que he sido y que
ya más nunca seré.
En la madeja de los sueños,
aquella que tejí con mi intenso sudor,
reside mi felicidad de juventud y que
ya más nunca tendré.
Los agujeros negros de las calles de
Siria,
lloran ríos de sangre, lloran los muertos,
atrapan a los niños que corren
para esquivar sus infaustas vidas.
En los boquetes infinitos del suelo
abrupto,
las metralletas arrasan con todo, arrasan con ellos,
las balas atraviesan los muros
de un país ahora sin vida ni ley.
¿Dónde quedó todo lo que hubo que más nunca volverá?
Las flores disecadas quedan atrapadas bajo
el polvo,
donde las lágrimas al viento rezan a su Dios
con odio.
Los niños abrazan a sus madres, pero
sus madres quedaron solas,
solas ante la inmensa tempestad de
la desgracia en carne viva.
Siria… Guerra y muerte. Muerte y guerra.
Dejemos que las almas perdidas puedan
volar y lanzar al viento
el suspiro que les traiga la libertad.